Llegué al centro de desintoxicación Zeus en Tarragona completamente destruida por mi adicción al alcohol. Había intentado dejarlo por mi cuenta muchas veces, pero siempre volvía a caer. En Zeus, no solo encontré un equipo profesional dispuesto a ayudarme, sino también un grupo de personas que entendían por lo que estaba pasando. El tratamiento fue duro, pero con el apoyo del equipo y de los otros pacientes, poco a poco fui recuperando mi vida. Me enseñaron a entender mis desencadenantes, a enfrentarme a ellos sin recurrir al alcohol y a construir una nueva vida llena de propósito. Hoy, miro atrás y apenas puedo reconocer a la persona que era antes. Estoy eternamente agradecida a Zeus por darme las herramientas y el apoyo necesario para superar mi adicción y comenzar una vida sobria.